Plantaciones de Musáceas. Plátanos y Bananos.
En los Sistemas Agrícolas los suelos constituyen un recurso natural esencial, generador de insumos y materias primas, así como servicios a los ecosistemas y del medio ambiente y dentro del cómo parte fundamental; el Hombre y los demás seres vivos.
Una de las principales causas de la baja productividad de las tierras es el inadecuado uso, manejo y preparación de los suelos, lo que conlleva a un rápido deterioro de las condiciones físicas, químicas y biológicas de estos, generando pérdidas económicas debido a la baja productividad, así como la degradación del medio ambiente.
Los suelos pueden ser recuperados en un lapso de tiempo determinado a través de la implementación de prácticas de manejo integral diseñadas de acuerdo a las condiciones propias del medio, acciones que en conjunto contribuyen no solamente a crear un ambiente propicio para el desarrollo de los cultivos, sino también a la eliminación de factores que afectan la productividad de las tierras, tales como: baja fertilidad, compactación de suelos, erosión, baja infiltración, drenaje pobre y exceso humedad dentro del perfil del suelo.
El uso y manejo inadecuado de los suelos influye directamente en la relación suelo-agua-planta, factores muy importantes en el desarrollo y productividad del cultivo de banano. La importancia del suelo como un reservorio de agua es determinante en la productividad y cuidado del suelo.
El espacio poroso del suelo ocupa entre el 40 y 60% del volumen total del suelo, donde se almacena el agua, el aire y algunos gases del suelo. El desconocimiento de estas funciones del suelo conlleva a un mal manejo del recurso agua y a la vez del suelo, generando un crecimiento anormal de las plantas, produciendo fruta de mala calidad y finalmente pérdida o baja de la productividad.
El suelo está compuesto básicamente de una mezcla de material mineral (45%), aire (25%), agua (25%) y materia orgánica en menor proporción (5%),
La productividad es un indicador de las condiciones del suelo, dado que esta refleja directamente los cambios que se suceden tanto en las propiedades como en las características de este. Un aumento o disminución en los niveles de productividad, es un indicador de efectos positivos o negativos relacionados con el manejo de los suelos y del cultivo.
Es necesario integrar el manejo de los suelos como parte del sistema productivo adaptado a las condiciones propias del medio y de las fincas en particular, si descuidamos o manejamos inapropiadamente el suelo, fácilmente podemos obtener productividades más bajas de lo esperado, pues destruido el suelo, es imposible pensar en buenos rendimientos y en una agricultura sostenible.
El manejo integrado de suelos va dirigido a mejorar las condiciones físicas-químicas del suelo, garantizando un ambiente ideal para el crecimiento y desarrollo de las plantas. Eliminar la presencia de capas endurecidas dentro de los primeros 100 cm. de suelo, que limitan la profundidad efectiva y el crecimiento radicular de las plantas. Mantener los niveles freáticos por debajo de los 100 cm. de profundidad. Eliminar o disminuir la compactación de los suelos, especialmente dentro de los primeros 50 cm. superficiales, garantizando una libre penetración y crecimiento de las raíces. Incrementar la porosidad del suelo, la rata de infiltración y la retención de humedad.
Prácticas de manejo y conservación de suelos en el cultivo de banano
Mejorar la estabilidad estructural de los agregados del suelo. Garantizar un adecuado y oportuno suministro de fertilizantes a la planta y al suelo, teniendo en cuenta el desarrollo fenológico del cultivo.
La preparación del suelo se debe realizar con la maquinaria adecuada y que más se ajuste a las condiciones de los suelos. Devolver al suelo las condiciones estructurales necesarios a fin de propiciar un ambiente ideal para el crecimiento y desarrollo de los microorganismos del suelo, ya que estos juegan un papel importante en la transformación de la materia orgánica, así como en la productividad sostenible del suelo.
Mantener un adecuado flujo de aguas freáticas y superficiales evitando daños al cultivo o impidan el crecimiento normal de las raíces, así como reducir el escurrimiento superficial y controlar la erosión de suelos. Reducir los costos de producción. Incrementar la fertilidad y productividad de los suelos a través de materia orgánica mineralizada.
Los suelos como sumidero natural del carbono son determinantes en las regulaciones de las emisiones de Dióxido de Carbono (CO²) y de otros gases de efecto invernaderos y su incidencia en la regulación del clima.
La Agricultura está considerada una de las actividades del hombre que más afectaciones al medio ambiente causa, debido al Sistema convencional de preparaciones de suelos para cultivar utilizados por la humanidad durante mucho tiempo, donde la inversión del prisma es la tecnología empleada y que provoca que el carbono capturado en el sumidero natural (suelo) se emita a la atmosfera como Dióxido de Carbono (CO²).
Utilizar todos los mecanismos de compensación para reducir la contaminación ambiental incluyendo el suelo debe ser objetivo fundamental que conlleva al aumento de la productividad del cultivo.
Compactación de suelos. Consecuencias.
La compactación ha sido considerada como el principal problema de degradación de la estructura de los suelos agrícolas a nivel mundial, y es considerada una de las amenazas que afectan la salud de los suelos Bananeros, la cual se agrava todos los años con las actividades de preparación convencional de los mismos y con las actividades pre y post cosecha, en algunos casos con alta mecanización, lo que hace que aumente la densidad y la degradación de la estructura químico-físico y biológica del mismo, afectando el desarrollo radicular y el transporte de sabia elaborada a la parte aérea de la planta, disminuyendo su desarrollo y mermando su expresión genética y por ende su potencial productivo.
Por sus características, las Musáceas (Plátanos y Bananos) requieren de suelos profundos que van desde 1.2 hasta 1.5 m, de textura ligeramente arenosa, aunque esto implique aumentar la frecuencia de riego.
En los suelos más arcillosos son necesarias las coberturas. Los suelos aptos para el desarrollo del cultivo del banano y el plátano son aquellos que presentan una textura franco-arenosa, franco arcilloso, franco arcillo limosa y franco limoso, debiendo ser, además, fértiles, permeables, profundos (1,2-1,5 m), bien drenados y ricos especialmente en materias nitrogenadas. El cultivo del banano prefiere, sin embargo, suelos ricos en potasio, arcillo-silíceos, calizos, o los obtenidos por la roturación de los bosques, susceptibles de riego en verano, pero que no retengan agua en invierno.
Para evitar los encharcamientos en estos tipos de suelos es indispensable mantener las estructuras fisicoquímicas adecuadas, garantizando la oxigenación necesaria. Estas estructuras se logran recuperar y mantener realizando una descompactación cada cierto periodo de tiempo en el suelo, con el fin de eliminar las posibilidades de asfixia radicular por la falta de oxígeno y evitar el encharcamiento con todas las consecuencias negativas que trae.
Esta es una de las prácticas culturales de manejo de suelos más comunes en todas las fincas bananeras y busca principalmente su aireación a través de la ruptura o fraccionamiento de los agregados del suelo, creando una mayor superficie específica y aumentando su porosidad y humedad. Para esta práctica utilizamos el Arado MH PLUS para rompimiento o fraccionamiento de la parte superior de suelo entre los 30 y 40 cms de profundidad.
La acción de descompactar y romper los agregados del suelo mejora su estructura fisicoquímica y con ello aumenta la porosidad, incrementa la infiltración, mejora la capacidad de enraizamiento del suelo y a la vez mejora la capacidad de retención de humedad del suelo. Esta práctica es aconsejable en suelos de texturas medias y finas, no se debe realizar en los suelos de textura liviana, como los arenosos, franco arenosos y limosos, ya que la estabilidad estructural de estos suelos es muy baja y un fraccionamiento o rompimiento de la estructura genera alta susceptibilidad a la erosión.
El uso de enmiendas ecológicas y/u orgánicas es recomendable porque ayuda a la mejora de las condiciones fisicoquímicas del suelo y con ello las condiciones biológicas del mismo. Cuando esas enmiendas son realizadas con minerales naturales el efecto se multiplica y con ello el nivel nutricional del cultivo.
De una correcta preparación de suelos depende el éxito de la cosecha. Los suelos bien estructurados permiten a los cultivos tomar los nutrientes de forma óptima y con ello aumentar las cantidades y calidades de los frutos agrícolas.
TECNOLOGIAS ECOLOGICAS PROPUESTAS.
Tecnología de Preparación de suelos y deshierbe ECO PLUS MH
(La mariposa de Hierro)
Su diseño y funcionalidad contribuyen a regenerar al suelo como un sistema vivo, donde se encuentra la base natural y reproductiva del planeta. El Arado Ecológico ECO PLUS MH es una alternativa vital para solucionar la crisis por la que atraviesa la agricultura a nivel mundial, se basa en leyes naturales que conservan la vida en el suelo y su papel primordial y determinante de la producción agrícola”. Su diseño de corte horizontal tiene varias ventajas que lo convierten en el Arado ideal ya que no invierte el prisma de suelo lo que repercute en la acumulación de agua, evita la desertificación, restablece las estructuras fisicoquímicas y la biota del suelo y no permite la salida del Carbono a la atmosfera.
Labores de preparación de suelos previas a la siembra.
La fase de preparación de suelos para cualquier tipo de cultivo depende la clasificación del suelo a utilizar y de los antecedentes de este y en dependencia de esto se planifica la metodología a seguir.
Selección del terreno.
La selección del terreno donde se va a plantas es uno de los factores de mayor importancia al establecer el cultivo, ya que está relacionado con la vida útil y calidad de la plantación, con la posibilidad de mecanización de ciertas labores, facilidad de cosecha y manejo de problemas fitosanitarios. Contar además con fuentes seguras de agua y con drenajes de calidad y/o posibilidades de realizarlos para evitar el encharcamiento. Las vías de acceso son importantes también.
Preparación del terreno.
La preparación del terreno para la siembra depende de la procedencia del lote de siembra y de las propiedades físicas del suelo tales como textura, estructura y topografía del terreno.
En la Agricultura convencional se recomienda la utilización de labores de arado y rastra mínimas de manera que se evite alterar el estado natural del suelo y no se predisponga a las plantas al volcamiento. Sin embargo, se realizan labores de preparación de tierras a profundidades mucho mayores, lo cual aumenta los daños, creando piso de arado e invirtiendo el prisma con las consecuencias negativas que esto genera en los suelos (Exposición del Carbono a la atmosfera, eliminación de los microrganismos benéficos, perdida de la fertilidad, aumento de la salinidad, aumento de la erosión, etc.)
El sistema radicular del Banano puede alcanzar más de 1.50 m de profundidad en suelos con características estructurales adecuadas.
Es importante destacar que el sistema radicular del banano posee raíces superficiales que se distribuyen en una capa de 30-40 cm, concentrándose la mayor parte de ellas en los 15-20 cm. Su diámetro oscila entre 5 y 8 mm y su longitud puede alcanzar los 2,5-3 m en crecimiento lateral y hasta 1,5 m en profundidad. El deterioro de la estructura de suelo afecta grandemente el sistema radicular no permitiendo que las raíces se desarrollen normalmente y que alcancen la profundidad establecida según la especie y variedad. Cada vez se utilizan más cargas de fertilizantes sin respuesta productiva, contaminando el suelo y dejando restos de fosfitos y nitritos en las capas más profundas donde no llegan las raíces.
El poder de penetración de las raíces es débil, por lo que la distribución radicular está relacionada con la textura y estructura del suelo, de ahí la importancia de la utilización del Arado Ecológico ECO PLUS MH desde el comienzo de preparación de los suelos para el cultivo del banano, se evita la alteración del estado natural del suelo, se protegen a los cultivos del volcamiento y se mejoran las estructuras químico-físicas y con ello se crean las condiciones idóneas para la vida en el suelo.
La profundización de las raíces por debajo de la roturación se logra por la estructuración adecuada del suelo y por sinergia con los microorganismos del suelo y su efectividad en el aumento de la rizosfera de la raíz. Además, se utiliza para realizar labores de deshierbe y eliminar la utilización de herbicidas con amplio espectro de residuales; lo cual perjudica la sanidad y calidad de los frutos.
La platanera tiene una gran tolerancia a la acidez del suelo, oscilando el pH entre 4,5-8, siendo el óptimo 6,5. El equilibrio del pH en el suelo lo logramos aplicando Minerales naturales altos en Silicio y Calcio y otros elementos nutricionales.
Las condiciones favorables para el desarrollo de la enfermedad son un exceso de humedad en el suelo, por cultivar en terrenos fuertes o arcillosos con mal drenaje, que retienen mucho tiempo el exceso de agua. Cuando no hay aireación, la infección se produce en las raíces sanas por encontrar un exceso perjudicial de dióxido de carbono originado por la respiración, y aunque la raíz principal está poco afectada, las raicillas laterales enferman y quedan destruidas. Otro factor que juega un papel importante es el pH del suelo, ya que los terrenos ácidos y pobres en calcio reúnen condiciones adecuadas para el desarrollo del hongo.
El deshierbe de las aéreas dedicadas al cultivo se realiza utilizando tecnología ECO PLUS MH, por lo que eliminamos desde el primer momento la utilización de herbicidas de ningún tipo, muchas de las cuales tiene efectos negativos al suelo y las plantas por periodos de tiempo largos.
Los marcos de siembra utilizados permiten el deshierbe y la descompactación de los suelos desde los primeros estadios de la plantación hasta bien avanzado el cultivo lo que propicia el cierre del campo libre de hierbas indeseables, que no solo compiten con la nutrición, sino que ayuda en el control de plagas y enfermedades.
PIE DE ARADO
Son muy recurrentes y conocidos los efectos negativos sobre los cultivos que causa el “Pie de Arado” qué corresponde a una capa dura localizada a una profundidad de aradura entre 15 y 40 cm, que se produce por el paso recurrente de arados de inversión del prisma o sea los arados de discos o de vertedera. En el punto de apoyo inferior de dichos arados se va generando una dureza que llega a espesores entre 8 y 10 cm o más y que resulta impenetrable para la raíz.
El piso de arado obstaculiza también el paso y la infiltración del agua lo que provoca exceso de humedad, disminución en la absorción de nutrientes menor crecimiento de la parte aérea de la planta y la consecuente reducción del potencial productivo.
Nuestra tecnología integrada Ecoplough IronButterfly es la única manera Ecológica para resolver de forma progresiva y a corto plazo, todos los problemas que anteriormente hemos mencionado en este artículo de Plantaciones de Musáceas. Plátanos y Bananos.
